Otra de las figuras frecuentemente utilizadas para configurar fraude laboral.

En una verdadera cooperativa de trabajo, todos los asociados gozan de la misma condición, y todos deciden, con un solo voto en la Asamblea General.

La cooperativa de trabajo no es otra cosa que un grupo de personas que se reúnen para producir un bien o servicio mediante su trabajo personal organizado en común. En ella, todos los asociados gozan de iguales derechos y obligaciones, siendo todos ellos electores y elegibles para los cargos directivos; el desempeño de tales cargos no comporta ventaja ni privilegio alguno, y los riesgos y resultados alcanzan a todos por igual.

En todos los casos en que se demuestre el carácter aparente de los "socios", éstos serán considerados trabajadores dependientes, mientras que aquéllos que dirigen la falsa cooperativa deberán asumir en forma personal la responsabilidad directa de todas las obligaciones laborales y de la seguridad social.

(Ver también "Trabajo no registrado").